Domingo de ramos en Sevilla

(Foto arriba: Hermandad de La Estrella a su salida el Domingo de Ramos de la Semana Santa de 2010)

Todavía estoy bajo los influjos de su magia... Ayer tuve la suerte de vivir mi primera vez en Sevilla en Semana Santa. Domingo de ramos, que estrené algo (para que no me corten las manos) y en la mejor compañía descubrir lo que es ese día en una tierra con raices. Y lo viví... y lo disfruté. Mereció la pena el viaje express en coche. Su olor particular en primavera no me defraudó. Pero su música (de ambiente) y de bandas profesionales acompañando los pasos, la emoción de la gente, el fervor, en suma, algo muy pasional, que allí se vive y se palpa, de una manera especial.

Como en toda aglomeración había algún que otro cafre que desentonaba, pero que seguramente lo haría en cualquier otro lugar, el que no sabe estar no lo sabe en ninguna parte. Pero dejando a parte esa cuestión, todo el mundo lo vivía con respeto e intensidad. De ver, de disfrutar, y de dejarse ver, por qué no.

Me impresionó todo, en parte por ser nuevo, pero especialmente el Cristo de la Humildad y la Paciencia. Unas cualidades dignas de admiración, a recordar por cualquiera, especialmente los que caen en ambos excesos. Incluido yo mismo, que a veces carezco de paciencia... Y también el Cristo del Amor, saliendo del Salvador, allí sí que había gente. La mayoría sí quería vivir aquello con intensidad, otros se dejaban llevar por la inercia de la fiesta. Pero sin duda fue un momento culmen a una tarde mágica, que espero poder disfrutar más veces. De momento, como se suele decir, si Dios quiere, volveré el Jueves Santo, y por supuesto, con la mejor compañía. Espero poder disfrutar, y captar el momento, su intensidad y la emoción de todos y de todo...

FOTOS: Pasionensevilla.tv